Toovari: una plataforma educativa

Hola a todos,

Os adjunto el enlace a la plataforma educativa, donde trabajo hace tiempo, y la verdad es que me gustaría saber que os parece. Es la primera plataforma de este tipo en España y la verdad es que hay muchos estudiantes utilizándola. A parte tenemos varias competiciones en las que los estudiantes aplican sus conocimientos para ganar a otros y pasar a una final en ¡¡¡VIVO!!!. A ver que os parece….

http://www.toovariworld.com/news-open.php?idnoticia=313

Un saludo.

Pensar en el futuro con optimismo

En general, mucha gente tiene un pensamiento pesimista hacia el futuro. Es evidente que la cifra de parados es muy alta.  Desgraciadamente, los tiempos de crisis son devastadores en muchos factores. Muchos padres no pueden permitirse pagar el comedor del colegio a sus hijos en algunos lugares de España… Y tienen que recurrir a los abuelos para que vayan a recoger a los niños al colegio y ayuden con sus pensiones a sacar adelante la familia…

De algún modo, el motor de cambio ha de comenzar en la mente de quienes podemos transmitir entusiasmo a los demás… Pensemos que nuestros alumnos buscan en nosotros una esperanza y una ilusión para seguir adelante. No todo está perdido aunque estemos en crisis… Durante la historia siempre ha habido ciclos de crisis……… Muchas veces el impulso está en cada uno de nosotros, en romper con los momentos de desaliento, y darlo todo para poner la semilla de cambio, y ser una onda expansiva de ilusión……. Porque sin ésta, todo el trabajo del mundo será nulo o casi nulo. Hemos de despertar en ellos, nuestros alumnos, las ganas de trabajar con autonomía, de luchar por metas, de afrontar los momentos adversos, y de seguir adelante pase lo que pase. Seguir apostando por la tecnología y acompañarlos en este viaje tan maravilloso de las ventanas digitales, pizarras, diccionarios electrónicos, ordenadores de bolsillo………. porque nos merecemos avanzar hacia adelante.

Reforzar en el alumnado la ‘responsabilidad’

Queridos compañeros,

Honestamente quiero hacer una llamada a educar en el valor de la responsabilidad… Esto se concreta en ayudar al alumno en darle instrucciones sobre los ejercicios… explicar bien los temas… pero obligarles a que se esfuercen en resolver las actividades… , que ellos vayan tirando unos de otros, la tutoría entre iguales que ya hemos comentado en este blog y en el curso … Y fomentar, por supuesto la autonomía, sin la cual, estos alumnos no tendrán posibilidades de tener éxito en la dura y cruda sociedad actual…
Paralelamente a esto, es necesario seguir trabajando con ellos los valores humanos, tolerancia, colaboración , respeto, hábitos saludables, técnicas de estudio….. Hay mucho trabajo por hacer… No dejemos llevarnos por esa frase que he oído más de una vez «total si no van a tener trabajo después de que terminen sus estudios». Permitidme que sugiera, que como profesores, no debemos decir eso … porque los profesores debemos buscar soluciones, salidas, motivarlos, … Siempre hay una solución para todo, excepto la muerte, ¿no? Y mientras hay vida debe haber esperanza.. Debemos ser positivos… Siempre luchar para abrir puertas… Crear grupos, sociedades, abrirse al mundo, relacionarse, busca la forma de salir adelante…. Creedme que eso solamente se consigue con la cultura del esfuerzo… Alemania está saliendo adelante , con puestos de trabajo de medias jornadas, sin lamentarse… Hay que hacer algo, no lamentarse. Esa semilla del esfuerzo debe contagiaras de ptofesores a alumnos, y de alumnos a padres, etc. Ánimo a todos! Juntos podemos!

Los sorprendentes avances de los bebés

Miro a mi hijo de 16 meses y no puedo parar de pensar lo sorprendente que es cómo los bebes van haciendo pequeños avances cada día: en los movimientos, en el habla, en los gestos,… Cada día que pasa te dan una grata sorpresa: esa primera sonrisa, ese primer «mamá», ese primer beso, ese primer abrazo (y los de todos los días),… Es algo tan especial y tan bonito…

 

¿ Y por qué no entrenar esta capacidad ?

No seré yo quien no defienda el lenguaje:  lo que se puede alcanzar y transmitir con él… pero ¿y nuestro cuerpo? Siempre que hablamos de la «comunicación no verbal» pensamos en lo que transmitimos o dejamos de transmitir. Es decir, pensamos en el otro, en cómo se nos recibe.

Sin embargo, me parece apasionante la idea de que entrenar «nuestra comunicación no verbal» puede provocar efectos positivos en nosotros mismos. Vamos que casi es un arte al alcance de pocos… «el arte de provocar en nosotros los efectos deseados». Tremendo reto.

No lo digo yo, palabra de TED 🙂

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Actividad 1º/ 2º Bachillerato.

Como todos sabemos la adecuación, coherencia y cohesión son las características de los textos bien construidos, por esta razón cuando una de ellas desaparece, por arte de magia, las otras dos restantes también. Ahora nunca olvidemos que existe otro arma «la inferencia». Pues ahora os brindo el reto para que comenteis el siguiente texto.

Apenas él le amalaba el noema, a ella se le agolpaba el clémiso y caían en hidromurias, en salvajes ambonios, en sustalos exasperantes. Cada vez que él procuraba relamar las incopelusas, se enredaba en un grimado quejumbroso y tenía que envulsionarse de cara al nóvalo, sintiendo cómo poco a poco las arnillas se espejunaban, se iban apeltronando, reduplimiendo, hasta quedar tendido como el trimalciato de ergomanina al que se le han dejado caer unas fílulas de cariaconcia. Y sin embargo era apenas el principio, porque en un momento dado ella se tordulaba los hurgalios, consintiendo en que él aproximara suavemente sus orfelunios. Apenas se entreplumaban, algo como un ulucordio los encrestoriaba, los extrayuxtaba y paramovía, de pronto era el clinón, la esterfurosa convulcante de las mátricas, la jadehollante embocapluvia del orgumio, los esproemios del merpasmo en una sobrehumítica agopausa. ¡Evohé! ¡Evohé! Volposados en la cresta del murelio, se sentían balpamar, perlinos y márulos. Temblaba el troc, se vencían las marioplumas, y todo se resolviraba en un profundo pínice, en niolamas de argutendidas gasas, en carinias casi crueles que los ordopenaban hasta el límite de las gunfias.

 

CORTAZAR, Rayuela